Dirección del proyecto: Dra. Silvana Flores Larsen. (Investigador Responsable) del proyecto ANPCYT PICT 2014-2605.  Proyecto tri-anual. Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica.

Resumen

Argentina es un país energéticamente vulnerable debido a su alta dependencia de los combustibles fósiles. Según el Balance Energético Nacional (2012), un 55% del consumo de electricidad del país lo realizan los sectores Residencial y Comercial y Público. En el caso de edificios de mediana y gran envergadura, como shoppings, supermercados, edificios en altura, etc., la energía destinada a refrigerar los ambientes suele constituir el mayor porcentaje de la factura de electricidad. Uno de los caminos efectivos para reducir el consumo energético de verano en las construcciones es la aplicación de estrategias bioclimáticas de diseño y, en particular, la utilización de fachadas protegidas por material vegetal. Esta estrategia tiene la ventaja de poder ser incluida no sólo durante la etapa de diseño del edificio, sino como mejora de un edificio preexistente (rehabilitación). En verano, las plantas se comportan mejor térmicamente que los elementos de sombreado tradicionales debido a que la temperatura superficial de las hojas es menor que la de un dispositivo de sombreado convencional, debido a que alrededor de un 60% de la radiación solar absorbida por la planta es transformado en calor latente debido al proceso fisiológico de evapotranspiración, lo que ocasiona que la temperatura de las hojas no se eleve tanto como en el caso de los materiales convencionales de los dispositivos de sombreado, en los que toda la energía absorbida se transforma en calor sensible. Además las plantas presentan otros efectos interesantes cuando se utilizan en edificios, que van desde lo ambiental (disminución de CO2, influencia en el microclima, etc.) hasta lo estético y psicológico (disminución del estrés, atenuación del nivel sonoro exterior, acercamiento visual a elementos naturales). El presente proyecto propone estudiar la utilización de coberturas vegetales aplicadas en fachadas de edificios de climas áridos para disminuir el consumo de energía convencional empleada para el enfriamiento de construcciones. Es un trabajo interdisciplinario que involucra tanto aspectos biológicos (comportamiento de las plantas frente a determinadas condiciones climáticas) como aspectos físico-térmicos y arquitectónicos. Se espera obtener un modelo de la fachada verde que pueda ser incluido en programas de simulación de edificios existentes, en particular, en EnergyPlus, software de libre disponibilidad desarrollado por el Lawrence Berkeley National Laboratory (USA) y de gran difusión en la comunidad científica internacional. El plan de trabajo incluye tanto actividades téoricas como experimentales, a través de la medición de los distintos características de las cubiertas vegetales (transmitancia solar en las distintas épocas del año, determinación de la temperatura de las hojas mediante termografía infrarroja) y mediciones en un edificio en altura de la ciudad de Salta, ya construido, que cuenta con una fachada verde hacia el Este.